Es curioso ver cómo los artistas de hoy en día homenajean a los grandes de otros tiempos. Numerosas técnicas plásticas rondan las cabezas de los grandes de ahora y con esas herramientas transmiten una serie de sentimientos y emociones. 

Un ejemplo de homenaje de lo más creativo, es el que ha realizado Jan Perkins. Esta artista ha reconstruido grandes obras de la historia del arte, con juguetes de plástico de los menús infantiles de comida rápida, adornos de cumpleaños, objetos relacionados con periodos festivos y otros elementos pequeños. Estas últimas, las combina con telas, botones, y objetos que han sido extraídos de la basura. 

La historia de estos retratos nace a partir de la afición por la artista de recoger objetos pequeños de todas clases. Una vez que ella recolecta estos tesoros, los clasifica y con ellas crea famosas piezas como «La Joven de la Perla» o «La Mona Lisa». 

Ni qué decir tiene que es una auténtica «obra de chinos», donde la paciencia, el buen hacer y la gran capacidad de organización dentro del proceso creativo, han hecho que estos cuadros actúen como propias obras de arte, a partir de los grandes de la historia.